Por Mgter. Ariel Miño*

En diciembre a través del decreto 134/2015 el gobierno de la Alianza Cambiemos daba una vuelta de página al sistema energético nacional, ya que declaraba la situación de “emergencia eléctrica” para todo el país hasta el 31 de diciembre de 2017, debido al discurso que pregonaron sobre la situación precaria que encontraron el sistema de generación y distribución, tomando las medidas necesarias para evitar un colapso. En este sentido, a fines de enero de 2016, el Ministerio de Energía y Minería de la Nación, modificó por Res. N°6/2016 los precios vigentes para el mercado mayorista de electricidad con el objetivo de reducir los subsidios en el sector. Adicionalmente, a través de la Res. N°7/2016, y con el pasar de estos dos años se establecieron nuevos cuadros tarifarios para los usuarios del área Metropolitana de Buenos Aires, es decir, los clientes de Edenor y Edesur. En el caso del AMBA, estas resoluciones generaron un incremento en el valor de las facturas que implicó multiplicar sus valores entre cuatro y seis veces dependiendo del segmento de consumo del usuario. (Gráfico 1)

Se puede apreciar en el Gráfico n°1 los aumentos del nuevo cuadro tarifario. Los incrementos varían según el nivel de consumo. Para los clientes hasta el segmento R5, que consumen menos de 1.000 kW/h por bimestre y son aproximadamente más del 85% de los residenciales, el aumento ronda el 450% a 500%. Para aquellos clientes con consumos superiores a 1.000 kWh/bim los incrementos son cercanos al 300%. El incremento promedio de la factura entre los usuarios residenciales alcanzaría aproximadamente el 370%, manteniendo los niveles de consumo.

El comienzo de año no fue ajeno a las políticas económicas de ajuste, nuevamente se entrelazó en un aumento en la energía eléctrica. En el caso del Gráfico nº2 se describe los significativos aumentos tarifarios en forma mensual en la categoría R1 pasaron de abonar $319.94 a $360.72 y la categoría R2 de $686.15 paso abonar $762.96 respectivamente. A su vez, de los usuarios categorizados en R3 a R5 los aumentos promedian 12.38%.

(Gráfico 2)

Mientras desde el gobierno nacional aseguran que el aumento de tarifas es para recuperar el sistema, hoy en general los usuarios del área Metropolitana, AMBA y específicamente los usuarios varelenses deben afrontar boletas cada vez más caras, pero el servicio sigue siendo igual de deficiente que hace unos años, con cortes de luz, problemas de baja tensión, errores en la facturación y falta de inversión en la atención al usuario.

La emergencia en el servicio eléctrico no se resuelve aumentando las tarifas eléctricas. Con el actual modelo energético, solo se ven los aumentos, pero las mejoras por las inversiones no llegan, mientras benefician a las empresas (EDESUR) a través de condonaciones de deuda en 430 millones de pesos. Este gobierno tiene como a la energía como un bien de lujo (se accede si se tiene dinero), y no como un bien social, necesario para satisfacer las necesidades básicas de la vida teniendo en cuenta que es un derecho humano el acceso a la energía. 

En este sentido, los nuevos esquemas tarifarios basado en medidas llamadas coloquialmente "sinceramiento" en los costos de la luz, claramente es una política energética iniciada en diciembre de 2015 (y toda la gestión estatal en la que se encuentra insertada), se sustenta en un paradigma neoliberal de fuertes beneficios a las empresas a través de los aumento a los sectores sociales y productivos del país. Están utilizando al Estado Nacional para atender a sus propios intereses, y esa decisión tiene mucho más peso que el deber de cuidar el desarrollo de la sociedad como un todo, especialmente de la clase trabajadora y los sectores populares.

Es decir, el “tarifazo” cada vez se siente más, la inflación no afloja, los salarios reales siguen disminuyendo, este escenario impactan fuertemente en los sectores populares, en las cooperativas de trabajo y en las pymes, y la pérdida de capacidad de consumo de una gran mayoría, que deberá ahorrar para pagar los servicios. Es inédito en la historia argentina, específicamente de los Servicios Públicos de Energía Eléctrica que una gestión (del Cambio) haya implementado aumentos en los valores que componen la factura de los usuarios de electricidad, pero dejan en evidencia la transferencia real de millones y millones de dólares generados con el esfuerzo de los trabajadores a las empresas que son administradas por el Estado en un país gobernado por sus propios dueños.

CENTRO DE ESTUDIOS DE POLÍTICAS PÚBLICAS PARA EL DESARROLLO REGIONAL (CEPPDRe.)