Por Héctor "El Gringo" Amichetti*

En dos años de gestión el presidente Macri se tomó más de 3 meses de vacaciones y buena parte del resto de los días los destinó a realizar viajes al exterior.

Demasiados días de vacaciones significa que el país funciona lo mismo sin presidente porque los que conducen son otros.

Muchos viajes por el mundo quiere decir que el destino del país depende de la voluntad del extranjero.

Es muy sencillo: al país se lo proyecta desde adentro o desde afuera de las fronteras.

Se elige el camino de la autodeterminación o se acepta el neocolonialismo.

¿Cuántos viajes al exterior realizó Juan Perón durante sus mandatos como Presidente de la Nación?

"Por más coherencia que exhiba un modelo, no será argentino si no se inserta en el camino de la liberación", señalaba el viejo líder.

Pensar Argentina desde sus propias potencialidades... 

La defensa del mercado interno, el desarrollo de una industria nacional fuerte, el manejo de los recursos naturales, el control del sistema financiero y el comercio exterior, un Estado interviniendo activamente.

La progresiva transformación de nuestra Patria para lograr la liberación debe, paralelamente, preparar al país para participar en la integración continental y la integración universalista", agregaba Perón.

La mentalidad neocolonial de los oligarcas nativos saltea sin disimulo etapas. Si los países avanzados disponen de tecnología y acumulación de capital suficiente (en gran medida proveniente de las riquezas y el trabajo de los países colonizados), hay que recurrir a ellos.

Viajes y más viajes para rendir examen implorando inversiones.

Si somos hijos de los europeos, recurramos a nuestros "padres" para que vengan a ayudarnos.

Moreno, Castelli, Monteagudo, Belgrano... Rosas, Artigas, Sucre, San Martín, Bolívar... hijos, nietos y bisnietos de europeos... 

¡Para qué carajo se esforzaron tanto por la independencia, si la solución estaba en el "Viejo Mundo"!

Parece que hemos retrocedido más de 200 años, el Virrey comunica a sus amos que en este territorio de ultramar ha sido superado el experimento populista como si informara del fracaso de la rebelión de Túpac Amaru, mientras el FMI exige moderación salarial para controlar la inflación.

Sin exagerar, podríamos afirmar que en este minuto de la historia argentina la Casa de Gobierno se ha trasladado a Davos y el Ministerio de Hacienda tiene su asiento en Washington.

*Secretario General de la Federación Gráfica Bonaerense. Integrante de la Corriente Federal de Trabajadores