Oveja Negra

7 de Agosto, San Cayetano.


08 de agosto de 2016

Oveja Negra

Compartimos algunas reflexiones que nos acercó el padre Francisco “Paco” Olveira, párroco de Nuestra Señora de Fátima en la isla Maciel.

Desde hace ya varios años la comunidad de la Parroquia de la Isla Maciel nos acercamos el 7 de Agosto al Santuario de Liniers a pedirle a San Cayetano que nos de fuerza en la lucha por el Pan y el Trabajo. Es un acto de fe en la mano Providente de Dios que no abandona a sus hijos y que quiere que todos y todas vivamos con dignidad.

Pero este año con un comedor abierto en abril –dónde funcionaba una cooperativa textil-y otro a punto de abrirse sentíamos que debíamos expresar algo más: este gobierno está matando a los pobres (“esta economía mata” Papa Francisco). Su “sinceramiento” de la economía está pasando por beneficiar a los más poderosos y tener como variable de ajuste a los trabajadores que están teniendo que elegir entre perder su puesto de trabajo o perder derechos y salarios. Eso el que ya no se quedó en la calle –realidad que constatamos día a día en la Isla Maciel-.

Por eso fuimos con nuestro Santo y con nuestras consignas: Con Macri ni Paz, ni Pan, ni Trabajo; Lo que San Cayetano te da, Macri te lo quita –consigna que nos prestó la revista la Oveja Negra-.

Porque San Cayetano te indica el camino de la fraternidad, del pan partido y compartido, de la mesa servida para todos, todo lo contrario de este proyecto de exclusión que está concentrando la riqueza en manos de unos pocos, excluyendo y descartando a buena parte de nuestro Pueblo.

San Cayetano no es el ministro de economía ni de trabajo pero si quienes nos gobiernan lo escucharan verdaderamente las políticas sin duda serían distintas. Por eso duele leer que Jorge Triaca diga en este día de San Cayetano “que Dios nos acompañe cuidando el trabajo y abriendo oportunidades”, cuándo el gobierno del que forma parte ha hecho que en siete meses haya “índices de desocupación significativamente altos” como nos recuerda el Papa Francisco, perder el trabajo sea hoy en día una de las mayores preocupaciones, haber acompañado el despido de tantos trabajadores del estado (especialmente los que trabajaban en territorio acompañando a los más pobres, como los 800 compañeros del Renatea que acompañaban al trabajador rural y fiscalizaban el trabajo esclavo) y su Presidente vetara la ley antidespidos y ahora anuncia que no renovará el –falso y no cumplido- pacto con los empresarios de no despedir porque ya no hace falta.

En nombre de San Cayetano y de este sufrido pueblo Argentino: Triaca renunciá.

 

Francisco

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