Oveja Negra

UN PUEBLO CON MEMORIA CONQUISTA SU FUTURO


14 de mayo de 2017

Oveja Negra

Un pueblo que goza de buena memoria, atraviesa los tiempos dolorosos con la esperanza de reunir sus sueños rotos. Un pueblo con memoria conquista su futuro.

Millones en cada rincón de nuestra Patria, postergaron sus diferencias ante la bronca acumulada en las entrañas. Dieron, dimos, un testimonio de amor inmenso por el sacrificio y la lucha de esas Abuelas y Madres incansables, por las hijas y los hijos que forjaron identidades secuestradas, por las nietas y los nietos que aún seguimos buscando.

Memoria, verdad, justicia y libertad son valores arraigados en lo profundo de la conciencia popular.

Fueron millones de pañuelos blancos alzados. Fueron millones, alzando los treinta mil sueños robados de nuestro destino común. Memoria, verdad, justicia y libertad son valores arraigados en lo profundo de la conciencia popular, son la fragua que aprieta los alambres de nuestra historia.

Lejos, muy lejos, en las antípodas de esos valores está el gobierno de Mauricio Macri. Una bisagra que pretende formatear en la desmemoria, la injusticia, el cinismo y la persecución, la historia de nuestro pueblo. No lograron hacer pasar la impunidad de los genocidas, y eso es una victoria enorme de la capacidad de resistencia de nuestro Pueblo.

Comenzaron banalizando el número real de desaparecidos en la última dictadura, asociando los derechos humanos a un curro, reinstalando aquella teoría de los dos demonios legitimante de las aberraciones cometidas. Promovieron ilegalmente a los jueces de la corte que permitieron el voto mayoritario e incluso, avalaron con su secretario de derechos humanos el fallo que autorizaba la impunidad de los genocidas.

La realidad los sorprendió como una bofetada. El rechazo popular les exigió un retroceso hipócrita. Volvieron sobre sus dichos y terminaron acompañando un proyecto legislativo que hubiere resultado innecesario, si no hubieran inaugurado en la Argentina un clima de impunidad, persecución política y restauración del modelo económico de la dictadura, que autorizó epocalmente el infame fallo de los hoy tambaleantes miembros de la corte.

La realidad los sorprendió como una bofetada, el rechazo popular les exigió un retroceso hipócrita.

Pretenden zafar del juicio de la historia. Pero como decía Cicerón “la hipocresía cae como flor marchita, porque ninguna falsedad puede durar mucho tiempo”.

Tan poco tiempo dura su mentira, que mientras Macri intentaba tapar el sol con la mano, el Banco Central volvía a emitir letras del tesoro para seguir endeudando a la Argentina como ningún país del mundo lo está haciendo a un ritmo tan acelerado. Tal y como si el ministro de economía fuere Martínez de Hoz.

Habilitando negocios para que el Grupo Macri siga engordando sus finanzas  a costa de un estado que se debilita con la depredación de sus empresas. Ahí está Avian, esa empresa vinculada al Presidente, cuestionada por la aerolínea colombiana a la que le falseó el nombre y que se apropia de rutas aéreas, debilitando a nuestra línea de bandera. Tal y como si el Grupo Macri siguiera haciendo negocios con la dictadura.

Designando jueces a dedo, silenciando al comité de la ONU que llegó para exigir la libertad de Milagro Sala. Tal y como si el Presidente se justificara aseverando que los argentinos somos derechos y humanos.

Los medios hegemónicos silenciaran la victoria popular. Macri seguirá mintiendo descaradamente. El puñado de cien familias y veinte grupos económicos que gobiernan, seguirán ajustando sobre los más humildes para engordar sus ganancias. Las corporaciones financieras seguirán con el negocio de la deuda, la timba especulativa y la fuga de capitales.

Pero los genocidas seguirán presos, los ministros de la corte seguirán firmando por un tiempo más sus sentencias, pero consientes que carecen de la más mínima legitimidad para hacerlo. Cualquiera que apriete un gatillo, cualquiera que se equivoque, sabrá que los poderosos te defienden, mientras no peligren sus intereses y privilegios.

En la calle se pueden sepultar sus anhelos de impunidad para el saqueo que llevan adelante hoy y el ajuste que pretenden profundizar.

El régimen desnudó su primera debilidad. La unidad de la clase dominante, precisa algo más que negocios para mantenerse. En la calle, se pueden sepultar sus anhelos de impunidad para el saqueo que llevan adelante hoy y el ajuste que pretenden profundizar en el futuro cercano.

Nuestro pueblo escribió un capítulo de unidad y movilización popular que significa un punto altísimo de conciencia y maduración necesaria para no asistir impávidos a un futuro que repite el pasado. 

El tiempo no para y nosotros seguimos ahí, en la calle, peleando.


                                                   Colectivo de Medios Oveja Negra

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